Las
obras de restauración de la iglesia de Santa Catalina, en Sevilla, comenzarán
dentro de una semana, una vez que se ha recibido la licencia de obras de la
Gerencia Municipal de Urbanismo y a punto de firmarse el contrato con
Constructora San José, S.A., empresa elegida para llevar a cabo esta obra tras
una selección en la que han participado diez constructoras.
Según
se ha informado en el encuentro celebrado esta tarde en el Arzobispado, las
hermandades con sede en este templo y la propia parroquia se han comprometido a
aunar esfuerzos e implicarse en la búsqueda de recursos económicos con los que
colaborar en la financiación de la obra. La primera fase que se va a acometer,
y que comprende las actuaciones en la fachada del templo y las excavaciones
interiores, tiene un coste aproximado de un millón de euros.
La
reunión celebrada en el Arzobispado de Sevilla ha sido presidida por mons. Juan
José Asenjo, y ha contado con la participación del secretario general de la
Archidiócesis, Isacio Siguero; el ecónomo diocesano, Alberto Benito; el párroco
de San Román y Santa Catalina, Manuel Cotrino; el arquitecto encargado de la
obra, Francisco Jurado; y los hermanos mayores de las tres corporaciones con
sede en Santa Catalina: José Manuel Marcos, hermano mayor de la Exaltación;
Manuel Guijarro, de la hermandad del Carmen y el Rosario; y Antonio González,
hermano mayor de la hermandad de Santa Lucía.
El
arzobispo de Sevilla ha destacado el clima de colaboración que está presidiendo
estos encuentros, así como la voluntad que ha constatado en las partes
implicadas por acometer cuanto antes esta obra. “No pedimos milagros, sólo la
colaboración que esté a su alcance”, ha subrayado el prelado, en referencia a
las acciones que van a llevarse a cabo en el ámbito de la feligresía. Por su
parte, Alberto Benito ha informado al párroco y a los hermanos mayores de los
pasos que se están dando para cerrar cuanto antes la financiación de la obra,
así como de la apertura de cuentas corrientes en las que se podrán realizar
donativos que irán dirigidos a sufragar esta fase de la restauración.